En nuestro programa número 260, exploramos las fronteras que atraviesan cuerpos, vidas y territorios. En un mundo hiperconectado y globalizado, el patriarcado sigue imponiendo límites a nuestras identidades, mientras el capital, ajeno a cualquier frontera, alimenta a la extrema derecha y al fascismo, que crecen a través de los discursos de odio.
Las fronteras no son solo líneas en un mapa; son mecanismos de control que determinan quiénes tienen derechos y quiénes quedan al margen. Se expresan en muros físicos y simbólicos que perpetúan sistemas de explotación y opresión. Un ejemplo claro son las políticas migratorias, que fuerzan a miles de personas a arriesgar su vida en su intento de cruzar fronteras.
Pero las fronteras no solo dividen territorios, también fragmentan identidades. El patriarcado impone el binarismo de género, el capacitismo y el cuerdismo excluyen a quienes no encajan en la norma de lo "funcional y productivo", la gordofobia dicta qué cuerpos son aceptables y el racismo y el clasismo sostienen los cimientos de estas barreras que separan privilegios de opresión.
Hoy hablaremos de los espacios liminares que habitamos. Oscar y Stef compartirán sus experiencias como personas diska y CODA, Maria nos acercará a las novelas La bastarda, además del documental 100 formas de cruzar la frontera. Valentina nos traerá a bell hooks para reflexionar sobre los límites entre el espacio privado y el público. Elis Dj estará al mando de los controles de la Ekka y, Rebeca junto con el equipo Fucsia, os dan vía libre para circular y viajar por estas ondas radiofónicas.
¡Dale al play!
Puedes escuchar este podkast en https://www.agorasolradio.org/podcast/sangrefucsia/fronteras/
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Pocos días después de que @LinternaDeDiogenes abordara a fondo el concepto de frontera en LDD18x28 - La danza de las luciérnagas. Vivir, pasar y morir en la frontera del Bidasoa, Sangre Fucsia profundiza también, en las otras fronteras que ni son geográficas. “La frontera es todo” se dice en este programa. La frontera en el cuerpo, de decía en el de la Linterna. Les dos invitades viven fronteras literalmente corporales y estoy muy agradecido de que hayan querido compartir sus experiencias, que espero nos ayuden a aprender al resto. Como mínimo ahora sé qué es una persona CODA.